Nuestro planeta es un gran ser viviente, un inmenso organismo que posee un gran pulmón donde efectivamente la Tierra respira
A través del extenso recorrido del río Amazonas y sus afluentes, de la tierra que baña y donde emergen gigantescos árboles de copas frondosas que entre las hojas, ramas y troncos cargan infinidad de grandes y diminutas especies; de sus caminos hechos de flora exótica, de lluvias abundantes que alimentan ese singular verde amazónico, sinónimo de existencia plena y complejo sistema de vidas, se teje el gran pulmón del mundo. Por décadas se lo ha calificado así.
Por eso, conocer la Amazonía es una oportunidad para comprender de forma vívida la importancia de este privilegio natural y la gran responsabilidad sobre la protección que los seres humanos le debemos por todo lo que nos entrega.